EL ALCALDE (Parte II: El detonante, Alcoy 1873)
Soy Agustín Albors Blanes,
hijo deL papel y deL progresodesde niño abracé la miliciay a los diecisiete añosfui subteniente de granaderos.Me casé con Rita Gueritó Cortsy tuve dos hijos: Julia y Modestoque fueron mi orgullo y mi consueloen los momentos de dolor y de zozobra.Admiré al general Espartero,pero luego me hice demócratay más tarde republicano,por influjo de Orense y Martín.Participé en la insurreccióndel valiente Pantaleón Boné,y por ello fui desterradoy perseguido por la ley.Regresé a mi tierra natalcon negocios y propiedades,textiles, papeleros y diligencias,que me dieron prosperidad.Y me dediqué a la políticacon fervor y lealtad.Fui teniente de alcalde y juez,y también comandante militar.Dirigí el levantamiento demócrata de Alcoy
y presidí la Junta revolucionaria
que se encargó de la defensa de la población.Tomé rehenes, monté barricadas,amenacé con fusilar a dos isabelinosFui alcalde de Alcoy dos veces,y en la primera Repúblicame enfrenté a la revuelta obreraque pedía pan y trabajo.Ordené disparar al puebloque se había sublevado,y por eso fui asesinadoen la calle del Mercado.Así acabó mi vida trágica,entre sueños y fracasos,entre luces y sombras,entre el amor y el odio.
La Revolución del Petróleo
En la noche del siete de julio de 1873.
En la plaza de toros de Alcoy se decide ir a la huelga
Ante tal desdén y tal desaire
los obreros claman por la renuncia del alcalde.
Al día siguiente sigue la huelga general
y los piquetes por el pan y por la dignidad
Pero a las cuatro de la tarde todo cambia
se desata el caos cuando Albors dispara al aire
A las diez de la mañana, ya jueves diez de julio
sin munición se rinden los guardias del Campanar
desde allí es bajado a la calle y ajusticiado.
A primera hora de la tarde
cuando el sol ardiente rozaba los 38 grados
y en Alcoy terminaba una revuelta sin cuartel
que marcaría para siempre su destino y su pasado
Una horda de chiquillos enfebrecidos
al son de un tambor rasgado y malherido
arrastraban al alcalde Albors por la calle
como gato despellejado y sin detalle
"Al río con él", gritaban con furia y desdén
"No más verdugos y tiranos del pueblo", decía la bandera
que habían tomado del ayuntamiento
y que ondeaba una niña con alma de guerrera,
Elena era su nombre; "La Francesa".
Alcoy en llamas
Fuentes;
Alcoi, julio de 1873 (wordpress.com)
En este pueblo (y fuera) perros y gatos saben que Pelletes fue arrastrado. Lo que no sabe tanta gente es quién era Vicent Arques Gregori. En julio de 1873 tenía 12 años. Entró en la prisión en diciembre acusado de arrastrar “al desgraciado Albors la mañana del 10” [la delación es de otro de 15 años que intentaba librarse de la prisión]. En abril, la guardia civil trasladó Vicent en Alicante [atado y a pie], en el castillo de Santa Bárbara, de donde no salió hasta octubre de 1876 después de pagar la fianza.
ResponderEliminarDe mote le llamaban Capsoga porque “era atrasado para su edad”. El juez no lo vio claro y llamó a declarar sus antiguos maestro (antiguos, porque en el momento de los hechos ya trabajaba de tejedor). Los docentes aseguraron que era perfectamente capaz de “discernir lo bueno de lo malo y para darse cuenta de los actos que la moral reprueba”. Otros testigos insistieron en que “parecía un bobo”.
Finalmente el fiscal lo acusó de sedición, de asesinar a Pelletes, de lesiones graves a un guardia civil, de menos graves a un segundo y de leves al capitán. En diciembre de 1887, catorce años después, fue absuelto por falta de pruebas. Él y el resto de acusados.
Esta es nuestra piedra para el nuevo margen que tenemos que construir entre todas y todos. Se lo debemos a Vicent Arques, a la Lleona, a la Bohua, al Teranyina, al Seguet de la Murtera, a Cagó, a Xufa, a Peret de la Sarga, a Graella, a Penca de Benilloba, a Bacora, al Besat, al Tortet del Rural, y a centenares de nuestros bisabuelos y tatarabuelos.
Fuente: Diego Fernández y alumnos del ANDREU SEMPERE.